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Escrito por Lasertek

Los riesgos de los precios muy bajos en el sector del metal

Los riesgos de los precios muy bajos en sectores industriales como el del metal

El equilibrio en los precios es siempre determinante para el devenir de una empresa, pero su futuro depende de que ésta aplique una estrategia adecuada a su posicionamiento y objetivos de futuro, no sólo para mantenerla, sino para poder avanzar, crecer y renovarse con nuevas técnicas y tecnologías, que harán que la empresa siga siendo competitiva constantemente a lo largo de los años. Los precios muy bajos impiden este futuro.

Factores que influyen en los precios

En el precio influyen muchos factores y obviamente todos hay que tenerlos en cuenta.

  1 Precio de la materia prima.

  2 Gastos de suministros: Electricidad, Gases, Agua…, y cualquier suministro de terceros que influyan en los procesos de fabricación.

  3 Amortizaciones y renovación de maquinaria.

  4 Personal

  5 Consumibles:  desde el papel de una impresora a piezas de recambio de una   máquina.

  6 Averías: Por buena que sea la maquinaria, se estropea u ocurren accidentes. Esto, además del coste en sí, hace bajar la facturación y si se prolongan demasiado, pueden repercutir en la pérdida de pedidos o incluso clientes.

  7 Productos mal fabricados:  Siempre hay un porcentaje de error sobre un producto fabricado (nos han dicho que esto ocurre…).

  8 Arrendamientos, tributos, seguros, etc.

  9 Transporte.

10 Generales, o todo aquello que influya directa o indirectamente en el funcionamiento de la empresa que lógicamente, han de formar parte del precio final del producto ofrecido.

Hay que tener todos estos factores en cuenta, el omitir alguno de los gastos tiene a medio largo plazo efectos sobre el futuro de la empresa.

Optimización preciosEl Futuro de la Empresa

Toda empresa tiene que estar en renovación constante, que viene marcada por el desarrollo de las tecnologías. Hoy en día, la globalización permite y exige acortar tiempos y distancias. Y claro está, hay épocas,  como en la que estamos actualmente, que en 4 años puede cambiar tanto la tecnología, que hay que renovarse en un plazo muy corto.

Ahí viene el riesgo de fabricar productos a precios muy bajos, que harán que la empresa pierda ese flujo de autorenovación y de como resultado el quedar fuera del mercado,

Puede que definir una política de precios bajos permita captar puntualmente un volumen grande de pedidos pero, al estar fuera del margen de gastos mínimos, harán que, día a día, se pierda parte del futuro de la empresa.

Más pedidos también  suponen más acumulación de gastos, y poco a poco,  no solo se pierde competitividad y esto es difícil de observar a corto plazo, ya que puede verse que la empresa tiene un volumen alto de pedidos. Pero llega un momento en que la empresa está financiando parte de los trabajos de sus cliente, ya que todos esos gastos  reales, no están repercutidos en el precios , y el cliente final tiene un producto más bajo, a costa de pérdida de solvencia de nuestra empresa.

equilibrio precio valorCuanto más tiempo se prolongue esta situación, más riesgo hay de entrar en colapso económico. La velocidad de este proceso dependerá del volumen de gastos no contabilizados.

Esta situación, a corto plazo puede llevarnos a buscar materias primas de baja calidad, reducir en mano de obra, o menos calificada, menos personal, buscar más créditos por falta de solvencia, aumentar los plazos de mantenimiento de la maquinaria y no renovación de la misma etc…

A medio y largo plazo puede afectar, por ejemplo, si aparece una nueva tecnología de nuestro sector y no podemos acceder a ella al no tener solvencia, lo que nos pondrá en una situación muy delicada de cara al futuro.

Todo ello al final supone pérdida de competitividad y de alguna manera sacrificar el futuro del negocio, así como puestos de trabajo directo, y empresas proveedoras

Guerra de precios.

Guerra de precios

En los momentos más críticos de nuestro negocio, por una línea incorrecta de precios, otras empresas solventes pueden hacer una baja de precios muy fuerte y dejarnos sin pedidos y en un colapso total.  Si nuestra línea de precios ha sido correcta y adecuada a nuestra estrategia de empresa, no tenemos porqué temer que otra empresa de precios fuera de mercado, ya que tendremos una solvencia económica en la que tenemos calculados todos los imprevistos.

Dificultad de subir los precios

Una vez que entramos con nuestros clientes en una línea de precios extremadamente baja, es muy difícil recuperar una línea de precios correcta por diferentes motivos.

El primero que nuestros clientes habrán gestionado sus productos en función a los precios que les hemos dado, y se verán muy perjudicados si subimos los precios sin justificación alguna.

Otro puede ser que el perfil de cliente que tengamos sea solo porque damos precios fuera de mercado y solo seguirá con nosotros si esa línea de precios errónea continua.

No se puede variar diariamente el precio de las piezas

Aunque el precio de los material está sujeto a muchas variables a nivel internacional,  no es correcto cambiar los precios si hay pequeñas variaciones en el precio de la materia prima. Por eso es muy importante tener precios adecuados y equilibrados en todos las piezas o productos.

Si hay pequeñas variaciones, al alza o a la baja,  tenemos que poder mantener una línea de precios lo más constante posible, que dará mucha más seriedad y seguridad a nuestros clientes, que a su vez también podrán mantener una línea de precios estable , aunque haya pequeñas variaciones en la materia prima,  y admitirán mucho mejor una subida cuando realmente esté justificada.

La imagen de nuestra empresa: posicionamiento

Dar un buen servicio es fundamental. Rapidez, agilidad, máxima calidad de la fabricación, una materia prima de calidad y que cumpla todas las normativas vigentes, así como una excelente atención al cliente.

Todo ello solo se consigue si el principio de la cadena es correcto, y lo marcamos con los precios de nuestros productos.  

Esta estrategia permite:

  • Poder garantizar calidad, estabilidad y regularidad,
  • Disponer de la tecnología adecuada con las máximas posibilidades para nuestros clientes,
  • Contar con personal más cualificado posible,
  • Flexibilidad de la cual se puedan beneficiar todos nuestros clientes.

 Todo ello conforma nuestro posicionamiento, la imagen que el cliente tiene de nuestra empresa, la tranquilidad y confianza de que siempre sabrá lo que puede esperar de nosotros.

 Conclusiones

La conclusión es que no tenemos que tener unos precios altos, ni bajos, tenemos que tener el precio correcto. Es la manera de mantener viva nuestra empresa indefinidamente, sin perder competitividad, capacidad de renovación y sobre todo, para dar el mejor servicio a nuestros clientes.

Y como siempre, si necesitas consejo, solventar alguna duda u orientación de presupuestos, puedes contactar con nosotros.

Felipe González.

Lasertek.